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El futuro del turismo es tecnológico, inteligente y sostenible

El turismo no está pasando por su mejor momento, pero parece que 2022 será el momento de volver a crecer y recuperar las cifras prepandemia.

Ante esta situación, es importante que se apliquen mejoras, tanto en la experiencia del cliente, como en la forma tradicional en la que estaba configurado el sector hasta ahora.

La actividad turística se irá recuperando, pero, para ello, es necesario una transformación tecnológica de todo el sector. Ahora los clientes manejan una gran cantidad de información, y son más exigentes a la hora de valorar la experiencia de usuario desde el momento en que inician la búsqueda hasta que termina el viaje, por lo que es crucial una transformación digital enfocada a la personalización de las necesidades del viajero.

La respuesta a cómo seguir siendo competitivos y reactivar el turismo pasa por sacar el máximo partido a tecnologías como la Inteligencia Artificial, el Big Data, la Realidad Aumentada o las apps móviles.

Nuevas tecnologías aplicadas al turismo

Las crisis son el mejor momento para reinventarse y adaptarse a las nuevas circunstancias para conseguir avanzar y mejorar. Es por ello que el futuro del sector turístico está marcado por varias tendencias tecnológicas que lo dirigen hacia un modelo más “smart” y sostenible (medioambiental, territorial y socioeconómico).

Inteligencia Artificial para el sector turístico

Las aplicaciones de la Inteligencia Artificial son tantas que sería imposible enumerarlas todas, pero ya encontramos aplicaciones en el sector turístico para aumentar la seguridad. Un ejemplo es el uso de computer vision, reconocimiento de voz o análisis predictivo para automatizar y reducir las interacciones entre personas en operaciones rutinarias como el registro en un hotel, el acceso a transporte público o la limpieza de espacios más transitados.

Otra de las vertientes, son las experiencias alternativas impulsadas por IA, como las visitas turísticas en vídeo y recorridos digitales, donde se pueden ver museos, archivos o bibliotecas.

Apps para móviles y Códigos QR

A pesar de que los códigos QR y las apps para móviles eran algo habitual en nuestra vida, en los últimos meses han sido claves para transformar la forma de viajar y de consumir en los bares y restaurantes.

Las restricciones sobre las cartas de papel en los bares han hecho ver la importancia de digitalizar estos establecimientos. La carta digital que se escanea con el móvil permite avanzar hacia un modelo mucho más cómodo, tanto para clientes como los restaurantes, que pueden hacer modificaciones del menú al instante sin tener que imprimir las cartas una y otra vez.

Otra de las grandes claves para esta modernización son las apps, como el ya tan comentado “pasaporte covid”. Las aplicaciones propias permiten personalizar los servicios de una empresa o de un organismo gubernamental, como en este caso la digitalización del certificado de vacunación que es ya obligatorio para poder viajar o acceder a establecimientos cerrados.

Realidad Aumentada

Cada vez son más las compañías que lo usan para mostrar a sus posibles clientes los destinos a los que pueden viajar sin moverse de la silla. Dada la creciente exigencia a la hora de elegir el lugar al que ir o el tipo de viaje, la realidad aumentada es perfecta para mostrar el camarote de un crucero por dentro o las vistas que tendrán al contratar un paseo en globo.

Las posibilidades son infinitas, y ya hay empresas que están ofreciendo sus servicios entorno a esta tecnología, preparando gymkanas virtuales, historias y misterios que resolver mientras se visita una ciudad… Solo en 2020 se convirtió en un negocio con valor de 120.000 millones de dólares a nivel mundial. Y con la llegada el metaverso, esta tendencia crecerá de forma nunca vista.

Internet of Things (IoT)

Estamos más acostumbrados a encontrar esta tecnología aplicada a la industria, pero nada más lejos, pues las aplicaciones del IoT en el sector turístico marcarán la diferencia en solo unos años. Se pueden incorporar sensores conectados dentro de objetivos como vehículos, maletas o edificios para monitorizar y personalizar las acciones que mejoren la experiencia del cliente.

Ya encontramos aplicaciones que permiten a los clientes interactuar con el termostato o el mando a distancia de su habitación desde su móvil. Incluso, se puede incorporar un sensor en la maleta para seguir en cada momento dónde se encuentra y evitar su pérdida en el aeropuerto.

Big Data

Se trata de una tecnología afianzada en muchos sectores, y el ámbito turístico le puede sacar muchísimo partido. Un ejemplo es la utilización de la información sobre los clientes para determinar qué tipo de campañas se lanzan según qué target.

Gracias al Big Data se comparan los gastos, las valoraciones, la nacionalidad, el tipo de viaje, etc. Estos datos se cruzan con datos públicos para determinar el perfil más adecuado y conseguir una tasa de éxito más alta en cada campaña, optimizando la inversión.

 

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Elena Canorea
Autor
Elena Canorea
Communications Lead