AMP y web responsive: por qué hay que pensar en móvil al crear una web
La tecnología AMP lleva varios años mejorando la visualización de páginas web en entornos móviles. Detrás de esa sigla se esconden unas mejores experiencias e interfaces de usuario para los omnipresentes smartphones y tabletas. Conocer esta tecnología y las que vinieron después sirve para entender la necesidad de una web responsive que sostenga las numerosas visitas móviles sin hacer que los usuarios huyan.
Qué es AMP
AMP o Accelerated Mobile Pages es un proyecto de HTML código abierto nacido en 2015 e impulsado por Google y otras compañías como WordPress, Twitter o LinkedIn para mejorar la velocidad de carga de las webs en los dispositivos móviles. Según un estudio de Semrush publicado en 2021, un 66% de las visitas venían de dispositivos móviles en las 1000 webs más visitadas del mundo.
El proyecto surgió en un momento en que numerosas webs no estaban adaptadas a smartphones y tabletas, lo que dificultaba la experiencia de usuario en estos aparatos. Así, para dispositivos móviles, las webs pueden contar con una versión AMP, que para los motores de búsqueda será igual que la versión de escritorio.
De AMP a las webs responsive
Pero hablar de webs responsive con los dispositivos móviles no es hacerlo solo de AMP (de hecho, en los últimos años es un término menos difundido). Ser web responsive es tener en cuenta los teléfonos y tabletas para diseñar el conjunto de una web. O sea, una web responsive es única y se adapta a cualquier dispositivo, de escritorio o no.
Entre las cuestiones que hay que tener en cuenta para conseguir una web responsive se encuentran:
- Trabajar pensando siempre en la mejor experiencia de usuario y en «mobile first».
- Evitar que las imágenes y vídeos sobrepasen ciertos límites, para que en el diseño móvil se vean bien.
- Ajustar automáticamente ancho, alto y resolución para cada pantalla.
- No usar Flash, que ya no soportan los principales navegadores web.
- Utilizar fuentes estándar fáciles de leer.
Como implementar una web responsive
En el caso de una página AMP, muchos gestores de contenidos (CMS) ya permiten crear una versión automática de las versiones de escritorio.
Si necesitas saber si tu web es responsive y qué mejoras habría que implementarle, puedes usar páginas cómo la ‘Prueba de optimización para móviles’ de Google. Al introducirle una URL averiguas si la página tiene «usabilidad en móviles», según palabras de la propia compañía.
Si ya has creado tu web, puedes convertirla a versión responsive con plugins, constructores de web o plantillas y temas específicas para ello. También puedes contar con la ayuda de profesionales que se encarguen de este trabajo.
Ventajas de contar con una web responsive
Entre las ventajas que AMP y el movimiento de webs responsives traen consigo se encuentran:
- Mejora de la velocidad de carga. Es la principal. Al fin y al cabo, fue la razón para crear el Proyecto AMP. Una web que se carga lento provoca que los usuarios se vayan y no regresen.
- Mayores posibilidades de leads o conversiones. Por tanto, teniendo en cuenta el punto anterior, con AMP y con un diseño responsive la velocidad de carga es mucho menor, lo que se traduce en que pasen más tiempo en la web y haya más oportunidades de hacer negocio con ellos.
- Mejora o mantenimiento de nuestra tasa de rebote. Al mismo tiempo, si la web carga antes y los usuarios no la abandonan por lenta, no empeora la tasa de rebote de nuestras analíticas web.
- Ahorro de costes de mantenimiento y de desarrollo. Diseñar una web responsive significa que no hay que actualizar diferentes versiones, lo que se traduce en menos gastos de tiempo y dinero al renovarla, ampliarla…
Por qué tener web responsive
Tener una web responsive significa dar a cada dispositivo móvil la atención que se merece y a los usuarios la mejor experiencia de navegación, acorde al teléfono o tableta que tienen.
Además, desde el punto de vista de la empresa y como veíamos más arriba, apostar desde el comienzo por una web responsive significa tener menos costes de desarrollo y de mantenimiento, lo que se traduce en un ahorro económico y en menos quebraderos de cabeza a largo plazo, ya que no hay que actualizar cada versión de la web por separado.
Si la web ya está lanzada y no es responsive, no hay que preocuparse: siempre se puede cambiar. Y en Plain Concepts tenemos un equipo de diseño UX/UI y de aplicaciones web especializado en ello. Construimos tu web responsive desde cero o la renovamos, y te hacemos partícipe de todos los cambios desde el comienzo.
Además, contamos con servicios que van más allá del diseño, como ilustración, modelado 3D o branding, que complementan este diseño responsive. Solo queda que nos escribas y comencemos a trabajar en equipo. Nos encantará escucharte.